miércoles, 23 de noviembre de 2011
El hombre de la pistola de oro (1974)
Es la novena entrega de la saga 007, ya con Roger Moore en el papel del agente británico.
En esta ocasión, Bond se enfrenta a un asesino a sueldo llamado Francisco Scaramanga (Christopher Lee), que es concocido como "El hombre de la pistola de oro" por razones que cualquiera puede suponer.
Una bala de oro con la inscripción "007" llega al cuartel de MI6, lo que solo puede significar una cosa, Scaramanga ha recibido el encargo de matar a James Bond, sin embargo es poco lo que se sabe del misterioso asesino, Bond decide localizar a una bailarina que habia tenido una relacion con 002, que habia sido asesinado por Scaramanga, alli descubre que la mujer ha guardado la bala como amuleto, con lo que Bond se lo quita seduciéndola, la bala en cuestión es llevada al departamento Q, donde se descubre que la bala ha sido fabricada por un armero de Macao, que resulta no conocer personalmente a Scaramanga, pero sabe donde recoge las balas, en el casino de Macao. Las balas, son recogidas por una bella mujer a la que Bond persigue, para saber más cosas de Scaramanga.
Bond es llevado al Queen Elizabeth (que está naufragado en la bahía) donde se encuentra con una mini-base del MI6, donde lo esperan M y Q y tambien el enlace del MI6 en Hong Kong, que explica la posible relación entre Scaramanga y Hai Fat un empresario tailandés que habría pagado un millon de dólares a Scaramanga por asesinar a Gibson, inventor del Solex, un artilugio capaz de convertir la luz del sol en energia.
007 viaja a Tailandia y se infiltra en la casa de Hai Fat, haciéndose pasar por Scaramanga, y pidiendo un millón más por matar a Bond, Hai Fat dice pensarlo e invita a 007 a cenar al dia siguiente, sin saber que el verdadero Scaramanga, escondido en el despacho, le estaba espiando. Bond es capturado al entrar en la cena y despierta en una escuela de artes marciales, de donde escapa tras una pequeña pelea.
Mientras tanto, Scaramanga mata a Hai Fat y de paso se hace con el Solex.
Tras una serie de peripecias, Goodnight (agente compañera de Bond) acaba secuestrada por Scaramanga llevando el Solex consigo, la señal que emite Goodnight lleva a Bond hasta una isla en la que Scaramanga tiene su refugio.
Bond viaja en aeroplano hacia dicha isla, donde Scaramanga tiene un hogar bastante agradable gracias a la energia solar, con lo que cuenta a Bond su plan, que no es ni más ni menos que vender el Solex al mejor postor. Durante una cena, Scaramanga se compara con Bond, pero este no considera que sean comprables, con lo que el asesino propone el duelo entre ambos Walther PPK vs Pistola de oro, en una especie de galeria de tiro de lo más psicodélica.
Para variar Bond, mata al villano, y al final se queda con Goodnight.
Las películas de Roger Moore, tienen un tono más desenfadado que las de Sean Connery, llegano a haber situacines cómicas, como en este caso, la pelea con las sobrinas del contacto de Hong Kong del MI6, la persecucion con canoa y el turisa americano... sin embargo no pierden nada de emoción ni de situaciones puramente "Bond" como el coche-aeroplano de Scaramanga, o el salto con voltereta incluída de Bond con el coche.
El Hombre de la pistola de oro es una de mis favorita de Roger Moore (junto con Octopussy), es entretenida, y con momentos divertidos, aparte de la imponente presencia de Christopher Lee como villano, cuenta con personajes como Nick Nack, sirviente de Scaramanga pero interesado en que sea eliminado, que ayudan a llevar la película un poco más allá del enfrentamiento entre Bond y Scaramanga.
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Me parece que en este caso se exagera con la comicidad y le quita cualquier indicio de seriedad a la trama. La presencia del Sheriff JW Peppers se pasa de absurda, le da una comicidad forzada y no aporta en absolutmente nada. La escena de artes marciales es bastante floja y termina siendo igualmente ridícula con dos colegialas salvando a Bond. Mary Goodnight es la quintaesencial rubia tonta, es difícil creer que el MI6 admita en sus filas a alguien que active una superarma con su delgado traserito en bikini, toda su exhibción en un trajecito de dos piezas en los 15 minutos finales es sólo una fantasía erótica para el público masculino. La salva la buena interpretación de Scaramanga por Christopher Lee, aunque su duelo final con Bond es igual de flojo y absurdo como toda la película. Hasta los vehículos carecen de todo glamour, incluso para la época de los "automoviles músculo" los Hornet y Matador de la extinta AMC no tienen nada de atractivos.
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